En blanco y negro
Casi en penumbras, en un día gris, su gran masa de cemento emerge tras los añejos árboles. |
Casi como el escenario de una película futurista se yergue este imponente edificio, rodeado de plazas y parques verdes, entre las avenidas del Libertador y Las Heras y las calles Agüero y Austria.
Un poco (pero muy poco) de historia
Mediante la Ley Nº 12.351 (que data de 1960) se destinaron tres hectáreas adonde se asentaría este ícono de la arquitectura. La obra fue adjudicada (entre decenas de propuestas) al proyecto de los arquitectos Clorindo Testa, Francisco Bullrich y Alicia Cazzaniga de Bullrich.
La piedra fundamental del edificio fue colocada recién el 13 de octubre de 1971 -once años después de la sanción de la Ley-. Las obras avanzaron lentamente y finalmente fueron suspendidas a comienzos de los '80, durante la dictadura autodenominada Proceso de Reorganización Nacional, retomándose hacia 1982. La nueva Biblioteca Nacional pudo ser terminada gracias a un préstamo del Reino de España realizado en 1990 y fue inaugurada finalmente el 10 de abril de 1992, por el presidente Carlos Menem. El material bibliográfico se terminó de trasladar el 21 de septiembre de 1993. El edificio cuenta con tres depósitos subterráneos: dos de ellos destinados a libros, que permiten depositar tres millones de libros y uno destinado a guardar revistas y diarios, con una capacidad de quinientos mil ejemplares. Además, en el edificio funciona actualmente la Escuela Nacional de Bibliotecarios, fundada en 1956.
Escalinatas y rampas rodean todo el edificio. |
Arquitectura brutalista y magnánima por donde se la mire... |
El edificio de la Biblioteca Nacional es un gran ejemplo a nivel internacional de diseño brutalista, un estilo surgido en los años '50 que se caracteriza por privilegiar las estructuras de hormigón armado dejadas a la vista y tratadas de manera escultórica, y principalmente se aprecia el lugar del parque dejado en el nivel de suelo y la sala de lectura como mirador sobre el puerto y el Río de la Plata.
Algunos accesos, rampas y escaleras maltratados por graffitis adornan sus paredes. |
La idea principal, según lo relata el arquitecto Testa, fue
ubicar los depósitos del establecimiento bajo tierra, aprovechando que el
Estado decidió expropiar la totalidad de la manzana para crear una plaza
pública, esto protegería a los libros del efecto nocivo de la luz y a su vez,
permitiría en un futuro expandir el espacio de los depósitos, de ser necesario
sin interrumpir el funcionamiento del establecimiento. Una vez liberada la
estructura del edificio del enorme peso de los depósitos de libros, se eligió
elevarla sobre pilotes para permitir la vista libre, dejando una plataforma de
acceso abierta de forma permanente, como una continuación del parque "por
debajo" de la biblioteca. De esta forma, resultó un edificio sostenido por
cuatro grandes columnas, que Testa caracteriza como un cuadrúpedo, como si se
tratase de un ser vivo.
La entrada al hall principal es por una terraza elevada con respecto a la plaza circundante, a la cual se accede por una serie de
rampas, escalinatas y escaleras caracol, al espacio protegido por el edificio y
rodeado por las cuatro columnas que lo elevan, permitiendo vistas de la Avenida
Las Heras, hacia el barrio “La Isla” y al Puerto de Retiro. Este nivel también
se conecta con la Escuela de Bibliotecarios, que funciona en un edificio
independiente cuya terraza es de acceso libre y tiene una serie de lucarnas de
hormigón con forma de hongos, y maceteros alargados que también funcionan como
bancos.
Espero les haya gustado el recorrido de una joya del diseño y patrimonio arquitectónico nacional.
Fuente: www.wikipedia.org
Ph: propias.
Laureano.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe debo una visita a la Biblioteca, desde que volví nunca fuí a pesar de que me queda tan cerca de casa! Te escribí en FB lo que me dijo mi hija de la clase de hoy, espero te guste! (la anterior fui yo!!)
ResponderEliminarHola Marce! hay que volver a ver esa bestia de cemento..me falta recorrida interior.
EliminarNunca me llegó tu comment a facebook...hazlo de nuevo.
Lau
Es un gran edificio, un gigante de hormigón que disrrumpe con el paisaje afrancesado de recoleta. No me encanta, pero valoro su arquitectura. Me recuerda al Teatro Argentino de LP; son esas construcciones de las que no se puede quedar al margen, verdad?
ResponderEliminarGracias por tu ayuda con las clases, amigo... Te quiero :)
sin dudas...grande, por donde se lo mire Mati. similar al Teatro Argentino cierto. En mi tiempo viviendo allí no lo pude visitar...otra cuenta pendiente de conocerlo, por dentro. Por fuera sí recorrí el TA.
EliminarGracias a vos por confiar en mí...fue divertido...encontré una alumna doble tuya...como si fuera una Matilde de 23 años. Muy loco!
Yo también te quiero,
Lau
Es genial la Biblioteca! Imponente. Me encantaron las fotos!;) Besoss!
ResponderEliminarGracias Luli...ya se viene la segunda parte con algo de color del mismo edificio...te espero!
EliminarBesos.
Lau