...siempre llega la calma.
Cantaba Alejandro Sanz a cuento del refranero popular y que por cierto, tiene muchas acepciones. Hoy la utilizo en sentido no tan figurado, puesto que para cuando tengo que trabajar en algún evento, ando a mil, -los que me conocen, asentirán- antes y durante el momento del armado de cada uno de ellos para que todo salga de maravillas, tal cual lo planeado.
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Las flores de cardo y las hortensias (del mismo color) florecidas a pleno. Era por diciembre.
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No hubo tormenta en éste caso (el post que antecede de la boda de Maricel), pero aprovecho para mostrarles unas fotos de un lugar que me transmite mucha calma, ideal para bajar decibeles después de estar enchufado a 220. El lugar en cuestión es el pueblo de Castelli, (en la Prov. de Buenos Aires). Las fotos las tomé hace dos años cuando fuimos de visita con amigos, al campo de otro...observen la luz de esos instantes. Adoré esos momentos.
Que los disfruten. Las fotografías? son todas mías.
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| Los campos amarillos de trigo, listos para cosechar. |
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| A la vera del maizal, crecen estos pastizales con yuyos por todos conocidos pero de nombre desconocido, ja! sé que es de la familia de los cardos. |
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| Uno de los graneros donde de guardan maquinarias y otros enseres... |
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| Un viajo arado apoyado sobre las paredes derruídas. |
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| Los vidrios rotos del galpón que remiten a glorias pasadas. |
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| La luz del atardecer, sobre el campo de trigo. |
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| Los caballos en la casa de la ciudad. |
Un beso enorme, nos leemos pronto.
Laureano
Hermosas imágenes Lau, morí por esas hortensias, mis flores favoritas!!! Me encanto como captaste la textura de las paredes viejas, da ganas de irse al campo aunque sea por un rato...yo soy rata de ciudad!!!! Jajajaja
ResponderEliminarGracias Marce...en ese momento estaban espectaculares las hortensias...se ven en su esplendor ciertamente.
EliminarLau
Me encanta el trigo: en diciembre, dorado y ahora que está de un verde divino . Garcia Lorca escribió unos versos....
ResponderEliminarAunque en algunos lugares , con las lluvias, lo deben haber perdido todo. Es el lado feo del campo, contra el clima no hay resguardo.
Buena semana
Hola Pato...ahí estaban a pleno los trigales...en su máxime esplendor...se advierten en las fotos por suerte y pobre ahora la gente del campo con las inundaciones...no ganan para disgusto.
EliminarBesos.
cuanta magia en las fotos, Laureano! de un tiempo a ésta parte la mote de "campechana" para las bodas en el countryside dio un giró de 180 y ahora es lo más... en lo que va del año tuve 2 y no tuvieron NADA que envidiarle a las de salón en la city,,, es otra cosa ♥
ResponderEliminarun beso grande
Mic.-
Hola Mic. Cómo estás? El campo se lleva en la sangre y eso que soy del interior, pero de ciudad...es una sensación...la paz, la calma. el verde. Yo también estoy haciendo muchas bodas con esa onda pero dentro de salones...es más difícil, pero sale de la media.
EliminarUn besoT.
Lau
El campo tiene su magia y vos lo reflejaste muy bien!
ResponderEliminarLos cardos... un amor!
Ni qué decirlo, Marce...le comentaba lo mismo a Mic justo antes que a vos. Gracias.
EliminarLau